El pasado miércoles, a las 11,12 horas, un vecino de un edificio de la calle Río Ungría avisó a la Policía Local del Ayuntamiento de Guadalajara para informar de la presencia de una persona en el hueco de la escalera y que “podría encontrarse en mal estado”.
Una vez en el lugar, se comprueba que se trata de un menor de 15 años, vecino de la capital.
El menor, que no llevaba identificación, informó a los agentes que acudía a dormir a ese lugar.
Una vez identificado, se comprueba que constaba sobre él una denuncia por desaparición realizada por su madre el pasado día 6 de marzo.
El menor fue trasladado a su domicilio y entregado a sus padres.