Otra vez la guerra del agua. No hay suficiente en el centro, pero… el agua es, otra guerra. El Gobierno Regional y el Gobierno del Estado se enzarzan. Como siempre, sin hechos, sin razones, para salir al paso.
¿Es que no hay agua, después de lo que ha llovido y sobre todo después de lo que ha nevado? Prima el discutir, sin un PLAN NACIONAL, que sea aprobado por consenso y aporte soluciones a los afectados. Ni un proyecto -después de tantos años-, para solucionar de una vez y para siempre, un problema que se repite año tras año.
Un ejemplo: en el 2015, mientras se inundaban las tierras de la cuenca del Ebro, se desembalsaban 38 hm3 de donde no había, porque estaban en mínimos los pantanos de Entrepeñas y Buendía.
«Me pregunté. ¿Alguien desde Murcia, desde la Comunidad Valenciana o desde Castilla la Mancha, ha visitado los embalses de donde sale el agua en cuestión? Yo sí puedo hablar de lo que he visto. Este es el panorama del Pantano de Buendía, desde la parte opuesta de la presa. Desolador paisaje. Entre los dos pantanos, están al 23, 51% de su capacidad real» (7-04-2015).
http://belmontejosemanuel.blogspot.com.es/2015/04/asi-cualquieragobierna-este-pais.htmluieragob
Las visitas políticas a los Pantanos del Centro, no soluciona nada, pero… se moviliza a la gente, a las televisiones, ofrecen titulares, fotos y pancartas. ¡Pura demagogia!
Historia y hechos.
Han pasado 39 años desde el primer trasvase Tajo -Segura. Fue el gobierno de Adolfo Suárez, quien lo inició el 31 de marzo de 1979. Y los trasvases han estado ahí lo que llevamos de democracia. Quienes buscan réditos, prefieren ignorar la realidad, enfrentando a los españoles o desatando cada cierto tiempo la guerra del agua. ¿Rentable?
Claro, que para poder hacer ese trasvase, como el del embalse del Ebro a Cantabria, era necesaria previamente la ingeniería y la realización de unas ingentes obras, para embalsar y trasvasar. El de Entrepeñas, sobre el Tajo, se terminó en 1956. Y el de Buendía, sobre el rio Guadiela, en 1957.
En este país, como en todos, ha habido obras importantes desde siempre. Las de ingeniería hidráulica fueron costosas, se tardó mucho en hacerlas, pero han perdurado. Su utilidad ha quedado demostrada, en sequias persistentes. Son una fuente de progreso, y solidaridad. En muchos aspectos y en muchos lugares de España se vive gracias a ellas.
Aunque la realización concreta de las obras fueran realizadas por los gobiernos franquistas, la idea del trasvase fue un proyecto del ingeniero madrileño, Manuel Lorenzo Pardo, aprobado en 1933, por el ministro socialista Indalecio Prieto: para llevar agua de la España húmeda a la España seca. Con gobiernos monárquicos o republicanos, franquistas o democráticos, se hicieron para utilidad de los españoles. Por eso, Azaña, ministro de la II Republica, dijo: «es obra de años, para la cual se necesita la asistencia de quienes hoy gobiernan, de quienes están en la oposición… porque quienes por patrocinar el régimen republicano una empresa de esta naturaleza le negaran su asistencia y su auxilio serían, no enemigos del régimen, sino unos miserables traidores a España”.
Calificar, los pantanos o el trasvase de «franquista», como ha hecho Page, o es ignorancia, o ganas de enfrentar ideológicamente a los ciudadanos, como ha explicado el director de EL HERALDO DEL HENARES, Roberto Mangas.
Los datos del despilfarro.
Despilfarrar es: «malgastar algo de forma insensata y sin necesidad». Da igual que sea dinero, o agua. En este caso, las das cosas. Es dinero de los españoles y agua que se tira mientras se agota una reserva que no llega ni al 25%, como hace años por estas fechas.
Juzguen ustedes. Estamos ya en abril y vísperas del anunciado trasvase. El pantano de Entrepeñas, sobre una capacidad de 835 hm3 el agua embalsada (26-03-2018) es de 186 hm3 el 22.28% según los datos oficiales. (https://www.embalses.net/pantano-967-entrepenas.html). Mientras que el de Buendía, con una capacidad de 1639 hm3, el agua embalsada (26-03-2018): 245 hm3, 14.95 % (https://www.embalses.net/pantano-931-buendia.html).
Pero, según datos oficiales que no quieren tener en cuenta, el CAUDAL DEL EBRO EN ZARAGOZA, el 03/04/2018, a las 12 h, era de 378, 18 m³/s, y en una hora 1.361.448 m³.
(http://www.saihebro.com/saihebro/index.php?url=/datos/ficha/estacion:A011)
Y un poco más abajo, el CAUDAL EBRO EN TORTOSA, 02/04/2018 04:00, 655, m³/s. que en una hora serían 2.358.000 m³. De ahí a Amposta y al mar solo hay 18 Km.
(https://www.google.es/search?q=caudal+del+Ebro+en+Tortosa&oq=caudal+del+Ebro+en+Tortosa&aqs=chrome..69i57.21255j0j4&sourceid=chrome&ie=UTF-8)
Según la equivalencia ( 1 hm3 = 1000000 m3), se están tirando al mar 2,358 hm3/h. Luego cada día, 56, 592 hm3 se están tirando, nada menos que toda la cantidad que necesitarían en el Levante y Murcia en 3 meses. ( Justo la cantidad que quieren trasvasar en 3 meses).
Y en verano, se volverá a echar mano de los pantanos, mientras se tira, lo que no sobra, porque se necesita en otra parte del territorio o podría traerse para aumentar la reserva y posibilitar futuros trasvases. Así estaba en 2017,
¿Por qué, unos y otros políticos, – de gobierno de España y regionales- no ponen remedio al despilfarro sin enfrentar, ni engañar al personal? ¿Por qué se trasvasa desde aquí, del Centro, con estos datos? El caudal del Ebro, se mantendrá varios meses o aumentará, dada la cantidad de nieve caída en los Pirineos. Mientras el caudal del Tajo y del Guadiela, no seguirá esa tendencia dada la escasez de precipitaciones en el centro.
La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, anunciaba el 22 de marzo, que un nuevo trasvase podría realizarse a partir del 1 de abril. El Gobierno y la Comisión gestora del trasvase Tajo-Segura podrían dar el visto bueno al primer traspaso de agua del Tajo al Segura, en once meses.
Según lo previsto, la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura dio el visto bueno a la cesión de 60 hectómetros cúbicos del agua embalsada en la cabecera del Tajo a razón de 20 por mes. La ministra Isabel García Tejerina dejó clara su postura «Todo lo que hay que hacer es cumplir con lo establecido en la ley. Ese estricto cumplimiento es lo que se hará». Según eso, la ley ampara el trasvase, porque según sus datos, entre los dos pantanos superan los 400 hm3.
No hay agua. No hay PLAN HIDROLÓGICO. Tobo lo enturbia la política.
Lo primero, es evidente, para quien quiera ver. Pero el problema no es de ayer.
Desde el siglo XVIII se está pidiendo un trasvase del EBRO AL LEVANTE, porque sobra y se desperdicia una gran cantidad de agua que se tira al mar.
Lo segundo, es también verdad, porque, cuando estaba el PLAN sobre la mesa, lo tumbó Zapatero, con el acierto y lucidez de su gestión siempre «discutida y discutible». La realidad, es que una de las primeras decisiones ejecutivas de José Luis Rodríguez Zapatero al llegar al poder en 2004, sometiéndose a las presiones de los nacionalistas catalanes, fue dictar un Decreto Ley que derogaba el Plan Hidrológico Nacional diseñado por el último ejecutivo de José María Aznar, con un presupuesto estimado de 4.200 millones de euros. Y un trasvase de agua, de 1000 hm3 de agua dulce, apta para consumo y regadío.
Con el slogan de «El mar, fuente inagotable de vida», con una campaña que solo en publicidad costó 7,5 millones de euros, Cristina Narbona, ministra de Medio Ambiente, puso en marcha un plan para desalar agua del mar a lo largo de la costa mediterránea, de forma que el agua dulce que el Ebro vertía al mar, más abajo en el litoral sería tratada para hacerla potable…¿?
Contra el PLAN HIDROLÓGICO que estaba en marcha, en 2004, se pretendía vender DESALADORAS, con el agua más barata que las del trasvase. Y se encargó a la ministra del Medio Ambiente, Cristina Narbona. Se aprobó la construcción de 501 desaladoras, desde Gerona hasta Málaga para desalar casi 800 hm3.
¿Se consiguió? En 2012, «Libre Mercado» decía: de las 51 prometidas hay construidas 17. «Hay desalinizadoras terminadas que están sin funcionar por no existir demanda. Y es que los agricultores rechazan la utilización de esta agua por ser mucho más cara que la que procede de otros canales y por su baja calidad, que pone en peligro incluso la salud de las explotaciones agrarias». Además de los costes de construcción, el consumo de energía es enorme.
Algunas terminadas están sin funcionar por no existir demanda. Y han aparecido facturas a algunas de las constructoras de desalación. A finales de 2016, alguna de ellas, estaba siendo investigada por la Audiencia Nacional, por estas «mordidas» muy superiores al millón de euros, según datos de Unidad Central Operativa de la Guardia civil. Están apareciendo financiaciones ilegales, de partidos o campañas, de las que no se habla, pero… todo se llegará a saber.
Por lo tanto, los ciudadanos de este país, de esta o aquella región, estamos en contra de la gestión de los recursos hídricos, tanto de los que salen de la cabecera del TAJO, como de la alternativa de ZP y el PSOE. Han sido una ruina de la que algunos se han aprovechado,
«Que no todos estemos de acuerdo con la gestión actual que del uso de esa obra se esté haciendo no da permiso a García Page para reescribir la historia omitiendo la realidad de las cosas. Es lo que tiene abrir el melón de la memoria histérica…» Roberto Mangas.
Sin embargo, lejos de ofrecer, de una vez por todas, una verdadera solución, consensuada y política, para el presente y el futuro del Centro, del Sur y del Levante y, aprovechar la capacidad de los embalses del centro, para verdaderas emergencias, Pedro Sánchez pretende recuperar el fracasado plan de las desaladoras de Rodríguez Zapatero Y Cristina Narbona. «El trasvase del Ebro no se hará ni ahora ni en ningún caso porque es inviable e injustificable», declaró entonces Narbona. Seguro que hay un por qué. ¿Lo explicarán?
http://www.abc.es/espana/abci-psoe-apuesta-potenciar-desaladoras-201803050209_noticia.html
La España del centro, seca y generosa, que lleva 39 años dando agua al Levante, Murcia y Almería, tiene derecho, por lo menos, al agua que se tira al mar y desperdicia, constante y diariamente, sin que ni el gobierno de España, ni las autonomías lo tomen en consideración. La ley, dice la ministra del medio ambiente, está para cumplirla. Para cuándo respetar los derechos, de los pueblos y los vecinos ribereños, para que, por lo menos, puedan seguir teniendo agua para darla.
Y un último apunte, la Cuenca del Segura, según los estudios tiene mucha más agua de calidad de la que llega del trasvase, y de la que no se habla o no interesa hablar.
Seguir ignorando los derechos de las personas, el ganado y las tierras, no se puede soportar. Ignorar es despreciar. El agua que se tira, es oro azul. Las urnas, algún día, serán más elocuentes que las pancartas y las mentiras.
José Manuel Belmonte