El Heraldo del Henares
La talla del Cristo de la Expiración de Cabanillas del Campo, advocación a la que se honra tradicionalmente en estos días, cumple en estas Fiestas 70 años exactos desde su adquisición.
Según han informado fuentes municipales en un comunicado, fue el sábado 3 de mayo de 1947, cuando la imagen del crucificado se recibió y “entronizó” en Cabanillas. Venía a sustituir una anterior, desaparecida durante la Guerra Civil.
Esta imagen fue comprada y donada a la Iglesia de Cabanillas por un vecino de la localidad, Victoriano Celada, y es obra del imaginero madrileño Tomás Parés, uno de los más reputados escultores religiosos españoles de la época.
La jornada de estreno de esta obra de imaginería fue un gran acto social de la época, en un evento al que acudieron las principales autoridades provinciales, con el entonces gobernador civil, Juan Casas Fernández, a la cabeza.
El alcalde de Cabanillas en 1947 era Víctor López, y era hermano mayor de la Hermandad del Cristo de la Expiración, Joaquín Jismero. En la vivienda del donante de la talla se celebró tras la procesión y la misa de aquel año una recepción oficial.
Cuentan las crónicas de la jornada que la imagen llegó de Madrid a las 6 de la tarde, fue recibida por las autoridades civiles y religiosas, se realizó una subasta de andas y de cintas, y luego se llevó en procesión a la Iglesia de Cabanillas, acompañada de la correspondiente Banda de Música.
Se recuerda que con motivo de este 70 aniversario de la talla, hasta hoy se puede visitar una exposición de imágenes con la historia de la localidad organizada por la Hermandad del Cristo, en la Casa de la Cultura.
