El Heraldo del Henares
El verano propicia que el cuerpo humano tenga que realizar un mayor esfuerzo para autorregular su temperatura y esa es una circunstancia que puede afectar negativamente a casi todos, en especial a los más mayores, a los niños, a aquellos que padezcan enfermedades crónicas, sobrepeso, mujeres embarazadas y personas con alguna discapacidad.
Crónica y fotografía de José Luis Solano Provencio
Síntomas como el dolor palpitante de cabeza, cambios en la piel, pulso y respiración acelerados, mareo, insomnio, náuseas o mareos, pueden ser indicadores de que se está sufriendo un golpe de calor o que se puede sucumbir ante el agotamiento por calor.
Para prevenir o remediar los efectos negativos que todo ello puede acarrear, es por lo que Cruz Roja ha lanzado la campaña informativa “Yo me protejo”, destinada a concienciar a la población de la importancia de de tomar ciertas precauciones para pasar un verano despreocupado.
EL HERALDO DEL HENARES ha querido conocer de primera mano los pormenores de esta campaña, la cual nos ha sido descrita en entrevista exclusiva por Arantxa Navarro, coordinadora del Programa de Salud en la Asamblea Comarcal de Cruz Roja en el Corredor del Henares.
Información para todos
“Se trata de entender que hay colectivos que son un poco más vulnerables que otros. Tratamos de hacer una parte dirigida a ese colectivo más vulnerable y otra más general al resto de la población. Es una iniciativa que coordinamos desde el Programa de Salud y con el equipo de voluntarios que tiene” afirma Navarro.
“Una de las acciones que se llevan a cabo con las personas mayores son las agendas telefónicas. Tenemos un equipo de voluntarios que hacen llamadas a esas personas mayores para ver como es su estado de salud y hacerles recomendaciones sobre alimentación, hidratación, etc.” añade.
Otra parte importante del programa veraniego de Cruz Roja es la que va dirigida a los más pequeños.
Tal y como indica la coordinadora del Programa de Salud de Cruz Roja Alcalá, “también trabajamos con el colectivo de infancia haciéndoles recomendaciones para que ellos entiendan lo importante que es no ponerse al sol sin protección e hidratarse”.
En este sentido hay que resaltar los programas que se están realizando en colaboración con empresas privadas y que van dirigidos a los niños, o aquellos que se realizan en las piscinas públicas del área de cobertura de la Asamblea Comarcal.
“Contactamos con varios ayuntamientos de la zona. La semana que viene vamos a realizar una actividad en la piscina de Villalbilla, donde el ayuntamiento nos cede un espacio para dar información, repartir folletos y trabajar con niños para que ellos interioricen el tema de la protección”, apunta Arantxa.
En estas actividades, aclara, «también intentamos hacer hincapié en el tema del medio ambiente en verano, prevención de incendios, cuidar el medio ambiente en verano intentando reciclar, no dejando basura en la playa, etc.»
Con la finalidad de ampliar lo más posible el alcance de la campaña, desde Cruz Roja también se realiza la difusión de los consejos y prevenciones haciendo uso de las redes sociales, en las que la organización publica semanalmente pautas a seguir durante el verano.
Cuando viene el calor
En ocasiones, y a pesar de los esfuerzos por prevenir determinadas situaciones, el golpe de calor u otras complicaciones derivadas de las altas temperaturas terminan sucediendo, siendo necesaria la intervención de profesionales sanitarios.
Ante tal circunstancia, tal y como afirma la coordinadora, «No intervenimos directamente a no ser que se ponga en funcionamiento nuestro servicio de emergencias. Eso no recae en el Programa de salud de Cruz Roja sino en el Servicio de Emergencias de la Comunidad de Madrid».
No obstante, hay unas directrices básicas que todos podemos aplicarnos si sentimos los síntomas del golpe de calor o si lo detectamos en alguien de nuestro entorno.
Bajar la temperatura corporal en un lugar fresco, hidratación, protocolos básicos de primeros auxilios o búsqueda de ayuda médica son algunas de estas medidas, las cuales deberíamos tener muy presentes.
«Son cosas que en teoría se supone que todo el mundo sabe pero luego nos cuesta llevar a la práctica», afirma Arantxa.
Un trabajo voluntario
“Las personas mayores a las que llamamos están encantadas, no solo porque reciben los consejos sino porque saben que hay una persona de Cruz Roja pendiente de ellos. En las piscinas pasa lo mismo. La gente tiene más o menos conciencia de lo que tiene que hacer pero agradecen el que haya alguien allí recordándoles ciertas cosas y dándoles pautas», afirma la coordinadora.
La transcendencia de esta campaña, así como sus resultados son manifiestos, y serían impensable sin la colaboración de aquellos que se emplean desinteresadamente en ella.
«Dependiendo un poco del año, estamos asistiendo alrededor de 600 a 800 personas, porque también depende de los voluntarios. Las dificultades que tenemos en la época estival es que dependemos de su disponibilidad. Cuantos más voluntarios tengamos más posibilidades de realizar actividades y a más sitios llegamos».
Para más información sobre los peligros de la ola de calor y el modo de prevenirlos, Cruz Roja ha publicado un video informativo.
