El Heraldo del Henares
Con fecha 17 de julio, unos días antes de marchar a su tierra para pasar disfrutar un descanso estival, el obispo diocesano, monseñor Atilano Rodríguez Martínez, ha firmado los nombramientos que afectan a sacerdotes y laicos en sus cargos respectivos de párrocos, capellanes, delegados y responsables de diversas funciones administrativas.
En lo que atañe a parroquias hay once sacerdotes afectados por cambios y dieciséis renovados en sus destinos actuales por otros seis años más, según han informado fuentes del obispado de Sigüenza Guadalajara en un comunicado.
Estos nombramientos afectan a media docena de parroquias rurales y a cinco de la capital provincial.
La mayoría los delegados pastorales también han sido renovados, quedando aún por designar las personas que estarán al frente de Migraciones y Juventud.
En las designaciones referidas a consiliarios, capellanías y funciones administrativas apenas se dan modificaciones.
El documento no recoge ninguna jubilación propiamente dicha y se completa con la referencia a un sacerdote que compaginará estudios en Madrid con responsabilidades diocesanas.
Dos parroquias de Guadalajara tienen nuevo párroco y otras tres estrenan colaboradores
Entre todos los nombramientos, destacar los que afectan a parroquias de Guadalajara capital.
Así, Santiago Apóstol, en la imagen de la izquierda, y Beata María de Jesús estrenan párrocos y vicarios al frente de la comunidad respectiva.
En la Beata, los sacerdotes Santiago Santaolalla Martínez y José Ángel Bachiller Rico sustituyen a Alfonso Martínez, que pasa a colaborar con El Salvador, y a José Antonio Fidalgo, que es el nuevo párroco de Santiago.
Por su parte, Rafael Iruela Moreno se asocia a Santa María la Mayor como colaborador; y Juan José Plaza Domínguez ha sido nombrado vicario parroquial de San Diego de Alcalá.
Fallece el sacerdote José Rey Cuevas, párroco durante 31 años de San Pedro Apóstol
El día 21 de julio de 2018 falleció en el Hospital de Guadalajara el sacerdote diocesano José Rey Cuevas. El funeral por su eterno descanso, presidido por el obispo de la diócesis y concelebrado por unos treinta sacerdotes, fue en la mañana del domingo 22 en la concatedral. A continuación, recibió cristiana sepultura en el cementerio de Romancos, donde nació el 12 de septiembre de 1938.
Fue ordenado sacerdote en Sigüenza el 31 de marzo de 1963. Los trece primeros años de su ministerio sacerdotal discurrieron al servicio de la pastoral parroquial rural, con destinos sucesivos en Cantalojas, Valdepeñas de la Sierra e Illana.
En 1976, fue destinado a Guadalajara. Primero colaboró en la parroquia de San Juan de Ávila, fue consiliario de Cursillos de Cristiandad y de la Acción Católica de Adultos, profesor de Religión y delegado de Matrimonio y Familia. Pero sobre todo fue párroco de San Pedro Apóstol durante 31 años (1983-2014).
Jubilado en 2014, durante tres años sirvió en la basílica de Santa María de Elche (diócesis de Orihuela-Alicante). En 2017 regresó a la diócesis, residiendo en la Casa Sacerdotal de Guadalajara.
