Ramón Colillas obtiene el mayor premio del póker español

La vida da muchas vueltas. Si no que se lo pregunten a Ramón Colillas. El catalán se ha proclamado campeón del PSPC 2019, uno de los torneos más prestigiosos del mundo, consiguiendo el mayor premio de un jugador español en el mundo del póker. Un hito histórico con el que ha cumplido un sueño que tenía desde pequeño. Sin embargo, el camino no ha sido fácil.

Múltiples fracasos y caídas a lo largo de su vida han marcado su destino hasta alcanzar la gloria en Bahamas. Un éxito que se debe en parte a los consejos de un misterioso jugador del popular juego de cartas.

 Colillas nació en Puig-reig, municipio de la comarca del Berguedà, al norte de la provincia de Barcelona. Como muchos niños siempre quiso ser futbolista profesional, e incluso en categorías inferiores pensaba que algún día podría vivir del fútbol. Un sueño que se frustró cuando se rompió los ligamentos de la rodilla«. Un primer obstáculo que superó con esfuerzo, con una recuperación que se prolongó varios meses. En su regreso a los terrenos de juego, primero con un equipo de categoría inferior y después con el Manresa, se volvió a romper los ligamentos. Una nueva piedra en el camino que no cambió su objetivo inicial. Volvió a recuperarse, pero finalmente llegó la tercera y última lesión de su trayectoria deportiva.

 La experiencia futbolística dejó una huella imborrable en Colillas, ya que, más allá de las lesiones que sufrió en su trayectoria deportiva, conoció el apasionante mundo del póker. Después de cada partido, él y sus compañeros iban a jugar a las cartas» como forma de entretenimiento.

Uno de esos días, un hombre mayor se acercó a la mesa donde estaban los chicos y les dijo que tenían que probar el póker. Ese mismo día conoció las reglas básicas del juego de cartas y abrió una cuenta en un casino online para ponerse a prueba. En aquella época, el joven que quería ser futbolista estudiaba Educación Física en la Universitat de Vic y dedicaba cada semana unas cuatro horas a las cartas, como un simple pasatiempo.

Una vez terminados sus estudios, Colillas comenzó a trabajar como entrenador personal en la Ciudad Condal. En la primera semana que estuvo allí trabajando acudió por primera vez al Casino de Barcelona,  donde todos los lunes se disputaba un torneo cuya inscripción era de 100€. Una primera experiencia presencial» en las mesas de juego donde se proclamó campeón, consiguiendo un premio de unos 3.000€. A pesar de esa aparente estabilidad en su vida, el catalán decidió regresar a su hogar para montar un gimnasio en Puig-reig«. Un nuevo negocio que tuvo un éxito absoluto, logrando una gran acogida en su pueblo natal.

La apuesta por el póker

 En el año 2014 tuvo que tomar la decisión más importante de su vida. El éxito del gimnasio le había dejado poco tiempo para el póker, pero, al mismo tiempo, los buenos resultados en los casinos online se habían convertido en una realidad. Apostó todo por las cartas, su verdadera pasión. Una apuesta que ha dado sus frutos a largo plazo con innumerables éxitos en los torneos más importantes del mundo, aunque también ha tenido alguna que otra mala racha. Hubo una época donde estuve siete u ocho meses sin ganar ni un solo torneo«. Durante ese periodo de tiempo apareció en su vida un personaje misterioso, un jugador que provocó un cambio importante en su forma de afrontar las partidas.

A raíz de esos consejos, Colillas recuperó en un único torneo todo el dinero que había perdido durante los meses anteriores. Posteriormente se proclamó Campeón Nacional 2018» en el Casino Gran Madrid Torrelodones, con motivo del CNP 888 Gran Final Madrid, sala de póker online que en estos momentos se encuentra inmersa en las superseries de 888 que concentran a tantos aficionados a los torneos. Un éxito que se extendió al Campeonato de España, donde consiguió el preciado Platinum Pass (valorado en 30.000$) para el torneo celebrado en Bahamas. Un país que ha sido el escenario del hito histórico de Ramón Colillas, obteniendo el mayor premio de un jugador español de póker, 4,5 millones de euros.