La empresa pública Enresa ha finalizado el desmontaje de la cúpula del Edificio de Contención de la central nuclear José Cabrera (Almonacid de Zorita, Guadalajara), que comenzó hace apenas dos meses, el jueves 31 de octubre.
Según han informado fuentes de esta entidad en un comunicado, los trabajos, que han cumplido con la programación establecida, han consistido en el corte con plasma de un total de 297 piezas.
Para ello, se han empleado dos grúas de gran tonelaje que han permitido la ejecución segura de la maniobra desde una plataforma auxiliar.
Una decena de personas han participado en estas operaciones.
La cúpula tenía un peso total de 225,2 toneladas y un diámetro de 31,4 metros.
La mayoría de las piezas segmentadas tienen un espesor de 16 mm, si bien las procedentes de la base de la misma constan de un espesor de 32 mm.
La previsión inicial establecía el corte de un total de 330 piezas, pero el buen desarrollo de los trabajos y la optimización de los mismos ha permitido que finalmente sean 297.
Los trabajos del desmontaje se han caracterizado por la normalidad, cumpliendo el programa establecido y siguiendo en todo momento las medidas de seguridad previstas.
Avances importantes en el proyecto
El desmantelamiento de la central nuclear José Cabrera ha alcanzado durante 2019 avances muy importantes, dentro de la etapa final en la que se encuentra el proyecto.
De esta manera, los cambios en la fisonomía externa de la planta son evidentes, en especial tras la retirada de la cúpula del Edificio de Contención.
A este hito, se han unido las demoliciones de los Edificios Diésel y Evaporador, así como los desmontajes de estructuras de los almacenes de residuos números 1 y 2.
Durante 2020, este ritmo seguirá con la demolición del interior Edificio de Contención, la demolición del Edificio Auxiliar, del Edificio Eléctrico (que albergaba la sala de control de la instalación), la de los almacenes de residuos 1 y 2, así como la del Edificio de Administración.
Algunas cifras
Por lo que respecta al personal, desde el comienzo del proyecto en 2010 han trabajado en el desmantelamiento una media de 250 personas que en su mayoría provienen de la provincia de Guadalajara.
Algunas cifras: 7.800 toneladas de baja y media radiactividad
Desde que Enresa asumió temporalmente la titularidad de la central nuclear José Cabrera y comenzó el desmantelamiento, en febrero de 2010, y hasta el 30 de septiembre de 2019, se han generado aproximadamente 32.500 toneladas de materiales.
De esta cantidad, alrededor de 7.000 toneladas corresponden a material convencional, 5.500 toneladas corresponden a residuos radiactivos de muy baja actividad, 2.300 toneladas corresponden a residuos radiactivos de baja y media actividad y 14.200 toneladas a material desclasificable.
Por lo que respecta al personal, desde el comienzo del proyecto en 2010 han trabajado en el desmantelamiento una media de 250 personas que en su mayoría provienen de la provincia de Guadalajara.
Desde su comienzo, este desmantelamiento se ha convertido en un centro de interés para la comunidad técnica y científica del sector, tanto a nivel nacional como internacional.
Durante todo el proyecto, las actuaciones de desmantelamiento realizadas por Enresa en la central nuclear José Cabrera, en especial las relativas a la retirada de los grandes componentes del sistema de generación nuclear de la instalación, constituyen, por su complejidad y escasas referencias internacionales, una fuente de experiencia y conocimiento muy útil para la comunidad internacional.
Las técnicas y metodologías de corte y acondicionamiento de residuos radiactivos aplicadas por Enresa en Zorita son novedosas internacionalmente, lo que motiva que este desmantelamiento se haya convertido en un centro de interés para la comunidad técnica y científica del sector de los cinco continentes.
Así, Enresa mantiene acuerdos de colaboración con entidades de países como Corea del Sur, Suiza, Francia o Suecia, entre otros, a los que presta su asesoramiento para el desmantelamiento de algunas de sus instalaciones.
Desde que Enresa comenzó con los trabajos, más de 5.500 personas han visitado estas instalaciones. Muchas de estas visitas corresponden a técnicos de países como Japón, Corea del Sur, Suecia, Argentina, Estados Unidos, Francia, Alemania o Bélgica, entre otros
Primera central nuclear que puso a España en la élite industrial internacional
Finaliza así una historia que comenzó en la segunda mitad del siglo pasado, cuando el 12 de diciembre de 1968 se inauguró oficialmente por el entonces jefe del Estado Francisco Franco, y se convirtió en la primera central nuclear en funcionamiento en España.
España pasaba a formar parte del entonces exclusivo grupo mundial de países que contaban con una infraestructura nuclear civil para impulsar el fortísimo desarrollo industrial y turístico que se estaba produciendo en el país en la década de los 60 del siglo pasado.
Durante los últimos años de su vida útil, sufrió numerosos incidentes que obligaron a decretar su cierre temporal, si bien, tras las oportunas reparaciones, volvió a acordarse su puesta en marcha, lo que provocó las protestas de organizaciones como Greenpeace y Ecologistas en Acción.
Su cierre definitivo fue decretado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero el 20 de abril de 2006, 38 años después de su acoplamiento a la red eléctrica.