Los profesores del IES Brianda de Mendoza de Guadalajara han expresado su indignación tras la decisión de la Delegación Provincial de Educación de aprobar a dos alumnos que habían suspendido al no superar las pruebas objetivas de un módulo de uno de los grados de Formación Profesional impartido en este centro de educativo.
Según han informado fuentes de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, han informado que han apoyado en su decisión a los docentes del IES Brianda de Mendoza y han lamentado que la Delegación, atendiendo a criterios no justificados, dé sistemáticamente la razón a los alumnos y a las familias en contra de los criterios del profesorado.
El malestar, compartido por 19 departamentos de este instituto de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato y Formación Profesional, se produce después de que la Delegación haya calificado de “poco objetivo” el criterio del profesor para fundamentar su resolución.
Sin embargo, según CSIF, «la Delegación no solo no aporta ningún criterio que justifique su decisión, sino que además no respeta la potestad discrecional, denominada discrecionalidad técnica, que conlleva respetar las valoraciones que hayan sido realizadas por el profesorado como órgano cualificado».
De hecho, los departamentos indicados han acudido al Defensor del Pueblo, que ya ha pedido explicaciones a la consejería de Educación por este episodio.
Según CSIF, la consejería, en un intento por acreditar dicha decisión señaló en sus resoluciones que el departamento no siguió los plazos, «pero lo cierto es que fue la propia Delegación la que resolvió un recurso de alzada en el segundo día lectivo posterior a la reclamación presentada en el instituto por el primer alumno aprobado, sin reclamar el preceptivo informe del departamento y sin dar tiempo material a su emisión».
Además, han asegurado que tal como ha señalado el departamento afectado, de Comercio y Marketing, «el Servicio de Inspección no se ha puesto en contacto en ningún momento ni con el profesor ni con el departamento didáctico para elevar una propuesta de resolución».
Según la consejería, una de las motivaciones de la resolución para aprobar al alumno es que presenta muy buenas notas en el resto de los módulos.
«Esto es una aplicación de facto del principio propuesto por la ministra Celaá de aprobar por madurez a los alumnos, algo que CSIF y el cuerpo docente del departamento aludido consideran un auténtico despropósito y un peligro, especialmente en aquellas titulaciones técnicas que habilitan a los alumnos para un ejercicio profesional para el que se requiere que tengan capacidades contrastadas».
«Desde el departamento de Comercio y Marketing se subraya que la madurez la han demostrado los alumnos que, en vez de acudir a Inspección educativa, se han preocupado de aprender para aprobar», han finalizado estas fuentes.