El Heraldo del Henares
Tras recorrer los pasos administrativos correspondientes, la histórica localidad del antiguo Común de Villar y Tierra de Medinaceli, Riba de Saelices, ha recibido la notificación oficial de la Junta de Castilla La Mancha según la cual se le ha aprobado su escudo heráldico.
La orden de la consejería de Hacienda y Administraciones Públicas hizo efectivo este nombramiento con fecha 19 de octubre, que se ha publicado este miércoles 26 de octubre en el Diario Oficial de Castilla La Mancha.
Según el boletín oficial regional, el emblema queda descrito de la siguiente manera: «Escudo español, partido. Primero de sinople una torre de oro aclarada del campo, sobre un monte en su color, y en la punta un ondeado de azur y plata. Segundo, partido y medio cortado, con un castillo de oro en campo de gules, un león rampante de gules en campo de plata, y tres flores de lis de oro bien puestas sobre campo de azur. Al timbre, la corona real de España».
El diseño del mismo se llevó a cabo entre el cronista provincial, Antonio Herrera Casado, y el alcalde del consistorio, Ricardo Villar, mientras que el técnico municipal, Javier Ortiz, fue el encargado de darle forma.
En su elaboración, una vez coordinados los aspectos a mostrarse en este distintivo, se optó por construir un escudo con símbolos identificativos de la localidad, orígenes, huellas patrimoniales y medio natural en el que asienta.
Así, en el mismo aparece una torre defensiva medieval, en alusión al haber sido una zona fuertemente militarizada y de frontera, donde antaño hubo varias torres defensivas, en diferentes zonas del término. La torre aparece sobre un fondo de color verde, denominado campo de sinople en el lenguaje heráldico, que se inspira en la riqueza de sus bosques.
A los pies de esta construcción, se apunta al río Linares que discurre junto a la población, junto con los numerosos afloramientos acuíferos que riegan la demarcación.
El segundo campo, con sus particiones, aparecen las flores de lis, un castillo y un león, con los que se rememora el señorío que durante siglos tuvo sobre la villa la casa ducal de Medinaceli.
Finalmente, todo el conjunto se halla bajo la corona real de la nación.
El escudo, no obstante, no recoge ninguna alusión a uno de los tesoros patrimoniales más importantes del municipio y uno de los más importantes de su clase en España: la Cueva de Casares, que, según la propia web municipal, «contiene sobre sus paredes una serie de grabados del Paleolítico que la convierten en el yacimiento de arte rupestre más importante del interior de la Península Ibérica».
Según han informado fuentes municipales en un comunicado, “la aprobación de esta insignia local no hace más que rememorar los antiquísimos umbrales sobre los que creció este núcleo y su relación con el medio; paisaje y paisanaje quedan de esta forma representados, dejando esta alegoría a las generaciones venideras”.
A partir de ahora, el escudo pasa a formar parte de todos los documentos y actos oficiales que sean susceptibles de su uso desde el consistorio.
