El Heraldo del Henares
Estimado director,
Me dirijo a usted para compartir mi caso, así como el de miles de personas que están enfrentando situaciones similares con la Inspección Médica ubicada en la C/Ferial de Guadalajara, especialmente en relación a problemas graves como depresión, autolisis y enfermedades óseas como la espondilitis. Quiero aprovechar esta oportunidad para informarle que soy periodista y tengo un programa de denuncia en YouTube llamado «El defensor», donde he abordado testimonios de pacientes y profesionales sanitarios sobre el trato vejatorio que reciben por parte de los inspectores.
He intentado ponerme en contacto con el gobierno regional, ministerios y otras entidades relevantes, pero lamentablemente no he recibido ninguna respuesta. Por lo tanto, me gustaría contarles mi caso personal, ya que me he sentido realmente identificado con los pacientes que han experimentado un trato no ético por parte de los inspectores.
Mi caso ocurrió durante la pandemia de COVID-19, una enfermedad que parece haber sido olvidada por muchos. Estuve gravemente enfermo y esto me ha llevado a desarrollar un trastorno mental ansioso-depresivo y agorafóbico. Al principio, no entendía lo que me estaba sucediendo y llegué al punto de intentar el suicidio porque me sentía atrapado en un túnel oscuro. Afortunadamente, poco a poco estoy saliendo de esa situación.
Durante mi período de baja médica, la inspección me llamó sin respetar el plazo legal de 365 días. Me informaron que debía presentarme para una «valoración». Sin embargo, bloquearon mis bajas permanentemente. Al llegar, la recepcionista, de manera bastante brusca, me llevó a una sala llena de gente, a pesar de que expliqué que tenía un problema de agorafobia. Le pedí amablemente que me permitiera esperar fuera, ya que la presencia de cinco personas en la sala me generaba mucha ansiedad. Sin embargo, de forma grosera, me ordenó esperar en la sala hasta ser llamado. Mi reacción fue temblar y llorar debido a la ansiedad que esto me causaba. Es importante mencionar que estaba bajo tratamiento psiquiátrico y psicológico, además de asistir a terapias de grupo que no pude completar debido a la aglomeración de personas.
No sé cuánto tiempo esperé en la sala, pero se me hizo eterno hasta que finalmente fui llamado por la inspectora. Por respeto a la privacidad, no mencionaré su nombre a menos que se me solicite hacerlo según la ley. En su despacho, ella no revisó adecuadamente mis informes médicos y solo pareció interesada en lo que le convenía. A pesar de que estaba nervioso y llorando, ella ignoró por completo mi estado emocional y afirmó que tenía un problema laboral, lo cual no es cierto, y me ordenó regresar al trabajo. Además, cuando vio las vendas en mis brazos debido a un intento de autolisis que tuve un día antes debido al agobio de la gente, y que el psiquiatra de urgencias del hospital había atendido, ella afirmó que lo había hecho para llamar la atención debido a mi visita a la inspección. Ante esta situación, decidí interponer una demanda que, desafortunadamente, perdí.
Posteriormente, debido a la fuerte medicación que estaba tomando, mis capacidades cognitivas no estaban al 100%, y la empresa decidió declararme no apto para mi puesto de trabajo, negándome la oportunidad de trabajar desde casa como lo había estado haciendo hasta entonces. Presenté otra demanda contra la empresa, pero también la perdí debido a la influencia de esta inspectora. Creo que la salud mental de las personas no se valora lo suficiente, y parecen pensar que todos estamos sanos y que todo es un mundo de rosas.
Por último, tuve un desacuerdo con la psicóloga durante una sesión. Cuando le mencioné que quería coger un cúter y terminar con todo, en lugar de brindarme apoyo, ella me incitó aún más al decir que me daría de alta. Ahora estoy esperando que me asignen un nuevo psicólogo y psiquiatra, pero no sé cuándo recibiré esa ayuda. Mientras tanto, sigo tomando seis pastillas al día para mantenerme adormecido y dormido.
Adjunto los enlaces a los programas de mi canal de YouTube sobre la Inspección Médica para que puedan comprender la gravedad de estos casos:
Agradezco su atención y le insto a que aborde esta situación de manera adecuada. La salud mental es un aspecto crucial que debe tomarse en serio y tratarse con compasión y respeto. Espero que esta carta ayude a generar conciencia sobre los problemas que enfrentamos y conduzca a cambios positivos en la forma en que se manejan los casos en la Inspección Médica.
Atentamente,
Rubén Hurtado, Guadalajara
NOTA DE LA REDACCIÓN: EL HERALDO DEL HENARES acepta el envío de cartas y artículos de opinión para ser publicados en el diario, sin que comparta necesariamente el contenido de las opiniones ajenas, que son responsabilidad única de su autor, por lo que las mismas no son corregidas ni apostilladas.
EL HERALDO DEL HENARES se reserva la posibilidad de rechazar dichos textos cuando no cumplan unos requisitos mínimos de respeto a los demás lectores o contravengan las leyes vigentes.
Estoy totalmente de acuerdo con este periodista, el trato recibido por una de las inspectoras fue de lo más lamentable.
Somos personas,que no nos ponemos enfermas por gusto,que perdemos un buen dinero cada vez que estamos de baja, que deseamos tener una vida normal pero no.podemos.
Bastante ya es nuestra lucha diaria,nuestros llantos al ver cómo nuestra vida cambió en meses, para que te miren con desprecio y disfruten dando altas a gente que no puede volver a empleo.
No me Dan l a baja estoy blokeada x esta inspectora y estoy con una tendinitis y una hernia y no me puedo ni mover con informes ahora tengo q recuperar días en mi empresa x esto y ni puedo q hago yo x esta señora q juega con esto?