La Asociación de Ribereños rabia porque se hayan anunciado con celeridad medidas de ayuda para los agricultores del Segura en cuanto han alzado la voz, pero no se haya hecho lo propio con todas las familias arruinadas por el expolio de agua perpetrado a cuenta del Trasvase Tajo-Segura, a pesar de llevar décadas sumidas en la crisis del agua. La sequía ribereña viene del saqueo del Gobierno.
Si la ministra Tejerina niega su derecho a un decreto de sequía, los ribereños exigen que ponga en marcha un decreto de “saqueo” que palie los efectos del Trasvase Tajo-Segura. “¿Para cuándo el decreto de saqueo?”, se pregunta el presidente de la Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía. “Está muy bien que ayuden a los agricultores, pero ¿cuándo ayudarán a las familias que, desde hace décadas, sufren las consecuencias del Trasvase?, todos esos negocios náuticos o turísticos afectados por el saqueo sistemático de agua al que nos vemos sometidos”.
Una vez más, se demuestra que la mentira tiene las patas cortas y no ha hecho falta terminar el año para pillar a la ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, en un renuncio. Donde dije Ribereños, digo SCRATS.
La ministra afirmó hace apenas dos meses, en su visita a Guadalajara, que era “muy consciente de que una de las prioridades que tenemos en marcha son obras de inversión” para los ribereños. “La mejora del abastecimiento de los Municipios Ribereños es una prioridad para el Ministerio”. Tan es así que anunció que, a pesar de que son muchas las necesidades a lo largo de toda la geografía española, “las que en primer lugar tienen que estar atendidas son las de estos municipios”, refiriéndose a los ribereños.
“Queda absolutamente claro que la señora ministra vino a Guadalajara a tomarnos el pelo; lo sospechamos en ese primer instante, pero ahora lo sabemos con total certeza cuando vemos que, una vez más, los ribereños somos españoles ya no de segunda, de tercera división”, lamenta el presidente de la asociación. “Es vergonzoso, nuestras familias se arruinan, nuestros pueblos se mueren y el Tajo agoniza ante las carcajadas de un Gobierno y una ministra que sólo piensan en los votos que Murcia les aporta”.
Y es que la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha aprobado adoptar medidas urgentes para paliar los efectos producidos por la sequía en determinadas cuencas hidrográficas. Entre otras muchas ayudas, se han contemplado las tan cacareadas exenciones a los regantes del Tajo-Segura. Una urgencia que no parecen tener con los ribereños. “Ha bastado la sola amenaza del Sindicato de Regantes para que el Gobierno se rinda a sus pies, mientras que nuestra agonía y nuestras protestas se las toman a guasa o las ignoran”.
Las familias ribereñas sufren la misma sequía cíclica y pasajera que todos, pero además sufren también el saqueo permanente del Tajo-Segura. “Los ribereños sufrimos la sequía y también el saqueo, pero no tenemos ayudas por ninguno de los dos conceptos”. Con los embalses al 9,42% de su capacidad, la situación es dantesca para quienes vivían del agua. Cuando comenzó la construcción de los embalses de Entrepeñas y Buendía, se anegaron las mejores tierras de cultivo de la zona bajo la promesa de que podría vivirse del Turismo. Y así fue, se produjo una ola de construcción de viviendas residenciales, hoteles e industrias turísticas y deportivas ligadas al agua en las riberas de los embalses. Pero desde la puesta en marcha del TTS, la ruina ha avanzado vorazmente devorando cualquier industria a su paso.
“La sequía afecta a todos, sí, pero algunos la venimos sufriéndo desde hace muchísimos años, porque el agua que deberían almacenar Entrepeñas y Buendía nos la ha robado el Trasvase Tajo-Segura; ahora padecemos la sequía general y nuestro saqueo particular”, lamenta Pérez Torrecilla. “Desgraciadamente, en lugar de ayudarnos, la ministra nos ha situado en el escalón más bajo, clasificándonos como ciudadanos de tercera y condenando a nuestras familias a la ruina social y económica”.
Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía
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