Con más bajas voluntarias que altas obligadas, pese al deseo del entrenador al cierre del plazo de fichajes de invierno, el Dépor abre la jornada 24 ante un auténtico gallo con aspiraciones de ascenso.
Sección coordinada por Felipe García
Fotografía de archivo de José Andrés Merino
GUADALAJARA – VILLARROBLEDO
El conjunto albacetense ocupa la segunda plaza del grupo con 48 puntos, siete sobre los morados que deberán cuajar un partido completo si quieren reducir diferencias y no perder puesto de playoff.
El rival acude al campo de la ribera del Henares en inercia positiva al llevar conseguidos 10 puntos de los 12 en juego en las últimas cuatro jornadas, con la vitola de segundo equipo goleador con 52 tantos.
Por el contrario, los de Alberto Parras han logrado 6 puntos de los 12 en juego con solo 35 dianas.
Todos a una
La victoria agónica de la pasada jornada en Azuqueca (0-1), ha levantado la autoestima de la plantilla morada que deberán ratificar su mejoría en su campo ante sus aficionados y con el nuevo regidor Pedro Martín Molina en el palco.
Queda mucha liga (13 encuentros) y un montón de puntos, pero los jugadores se confabulan con su entrenador para luchar hasta el final y compartir el objetivo de mantenerse entre los cuatro mejores, a pesar de la inferioridad de presupuesto y de los refuerzos frente a los seis equipos de cabeza.
El sábado día 3 a partir de las 16:30 horas con el cambio de horario en el Escartín, se verá si la era concursal surte efectos y convierten en feudo el escenario donde no consiguen la victoria desde el 7 de enero.