El sábado, día 10 de febrero, los agentes de la Policía Local del Ayuntamiento de Guadalajara denunciaron dos veces a distintas horas al propietario de un establecimiento de la calle Rufino Blanco.
La primera de ellas se le impuso a las 15,30 horas por realizar una actuación musical en directo sin tener licencia para ello.
La segunda denuncia tuvo lugar a las 1,40 horas por utilizar un equipo de reproducción musical sin poseer licencia correspondiente.