Los Mossos d’Esquadra están investigando el envío de una carta con dos balas dirigida a la presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del Partido Popular a la reelección en las elecciones del 4 de mayo, Isabel Díaz Ayuso.
Por el momento, se desconoce al autor de esta acción, aunque el paquete ha sido interceptado y retenido por Correos este pasado martes en el centro de distribución de Sant Cugat, en la provincia de Barcelona, antes de llegar a Madrid, según ha informado MiraCorredor.
Además, los sistemas de seguridad de Correos en el centro de Vallecas han detectado también este martes otra carta dirigida a la directora general de la Guardia Civil y que contendría cuatro proyectiles, un envío que está siendo investigado también por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Estos dos nuevos envíos se producen tras hacerse públicos los cuatro de la semana pasada: los sobres con balas para Marlaska, la directora general de la Guardia Civil y Pablo Iglesias, y la navaja con manchas rojas dirigida a la ministra Reyes Maroto cuyo autor, un enfermo mental, fue detenido.
La reacción de Ayuso, que se enteró de la noticia anoche, poco antes de ser entrevistada en TRECE TV, ha sido muy diferente a la que tuvieron en su momento PSOE y Podemos, que hablaron de «amenaza fascista» y responsabilizaron a Vox por su discurso.
La presidenta madrileña dijo que a este tipo de amenazas «hay que darle la importancia que tiene, que es ninguna», para evitar un efecto llamada del que ya alertó el día anterior durante un mitin en Torrejón de Ardoz en el que lamentó que las amenazas fueran aireadas en campaña por la izquierda.
«Esta gente busca su minuto de gloria. No les voy a dar el gusto», remarcó Ayuso sin señalar a ningún partido ni ideología. «Ante la violencia, serenidad y desprecio», señaló, tras insistir en que «no se puede hablar de esto todo el rato» porque se crea un «efecto imitación».