Carta de un padre preocupado: ‘Desde la delegación de Educación de la Junta en Guadalajara se está jugando con el futuro y la vida de un menor’

Quisiera aprovechar esta oportunidad para denunciar la vergonzosa actuación llevada a cabo por la Delegación de Educación de Guadalajara en la que sin ningún tipo de escrúpulo ni sensibilidad ha jugado con la vida de un alumn, al que en vez de ofrecerle y facilitarle los recursos que la propia legislación brinda, no ha hecho más que ponerle trabas, destruyendo su futuro y su desarrollo educativo.

La respuesta educativa dada por la Inspectora Jefe de Educación de Guadalajara fue cambiar a un alumno, que estaba estudiando un curso que dio comienzo hacía un mes, a otro curso que comenzó hace 7 meses y en el que de los 21 temas de los que consta el mismo ¡¡¡ Ya se habían impartido 14 de ellos !!!

Resulta surrealista, teniendo en cuenta recientes casos conocidos en los que algunos adolescentes han llegado a suicidarse por culpa de la negligencia de distintas administraciones, que desde la Delegación de Educación de Guadalajara estén “jugando a la ruleta rusa” con el desarrollo educativo y el futuro de un niño alcarreña.  

Y es que la actuación llevada a cabo por esta administración, primeramente, ninguneando durante casi 3 meses una solicitud de cambio de centro para este alumno, y luego, obligándole a matricularse en un curso que estaba a punto de finalizar, resultaría demencial a ojos de cualquiera.

El caso es que, debido a la imposibilidad, certificada a través de varios informes médicos, de que este menor pudiera seguir cursando sus estudios en su centro de origen. Se propuso un cambio de centro para que pudiera finalizar sus estudios en otro centro de Guadalajara. Contando con el visto bueno de ambos centros y hasta con tres informes médicos que avalaban y recomendaban este cambio de centro escolar.

Y ante esta más que positiva y razonable propuesta para el futuro y desarrollo educativo de este niño ¿Cuál fue la respuesta dada desde la Delegación de Educación de Guadalajara? En principio ninguna, ya tuvieron que pasar meses sin obtener ninguna respuesta y una auténtica odisea de escritos y peregrinajes hasta la Delegación de Educación, para que en un principio notificaran a los padres que no iban a autorizar el cambio de centro para su hijo, aunque finalmente y a regañadientes, terminaran autorizándolo. Llamando la atención que en esta ocasión “notificaran” a los padres que sí autorizaban el cambio de centro ¡¡¡ a través de un email!!! Seguramente pensaron…. a ver si no lo leen y así no hacemos nada.

Pero si hasta aquí la actuación de la Delegación de Educación puede parecerles kafkiana, la Sra. Inspectora Jefa de Educación de Guadalajara, Dª Pilar Fernández Miguelez, recientemente ha tomado una nueva decisión, dando otra vuelta de tuerca a esta auténtica sinrazón. Ya que, aunque el menor fue matriculado y comenzó uno de los dos cursos a los que tenía derecho en el nuevo centro, matriculándose en este nuevo curso de reciente inicio, por ser el curso que mejor podría fomentar su desarrollo educativo y porque, además, fue al que se le recomendó matricularse desde el nuevo centro. La Sra. Fernández Miguelez ha decidido, que no, que había que cambiar a este menor a otro curso que estaba a punto de finalizar y en el que de los 21 temas que se imparten en este otro curso ¡¡¡ Ya se habían dado 14 temas !!! Porque sí, porque ella lo dice y sin argumentar jurídicamente esta vergonzosa decisión. Dejando, como no podía ser de otra manera, hundido a este pobre niño y escandalizados a sus nuevos profesores. Curiosa la forma dictatorial y totalitaria que ha tenido la Sra. Inspectora Jefe de Guadalajara de “fomentar el desarrollo educativo” de este alumno.

Llegados a este punto, ¿ Que va a hacer el Sr. Delegado Provincial de Educación de Guadalajara D. Ángel Francisco Fernández-Montes González ? Quien conoce de primera mano el caso y las circunstancias especiales de este alumno. Existiendo otros casos, similares al de este menor, en los que desde la Delegación de Educación simplemente no han dado ninguna contestación, dejando a esos otros alumnos ante un total desamparo educativo.

Por cierto, sería bueno que el Sr. Delegado de Educación, cuando prometió con muy buenas palabras una comunicación al padre de este alumno para poder ayudarle, cumpliera su palabra. Aunque ya se sabe la credibilidad que tiene la palabra de un político…

Esperemos que esta vergonzosa actuación no tenga consecuencias trágicas para este niño de las que luego tengamos que arrepentirnos.

Fernando Arias Clemente. Guadalajara

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