El Heraldo del Henares
El pasado 30 de mayo, el presidente regional, Emiliano García-Page, asistió a un nuevo teatrillo en el que se representaba el inicio de las obras del centro de salud “de las 200” en Azuqueca de Henares. Teatrillo con montaje de carpa incluido que, por supuesto, pagaríamos los de siempre.
No tuvo empacho en soltar frases grandilocuentes sobre la importancia del “acto”, como que planifican obras “anticipándose a la demanda”, olvidando intencionadamente que su predecesor Barreda anuncio en abril de 2007 que intervendrían inmediatamente en el Centro, pero en realidad no lo tocaron hasta abril de 2011, porque llegaban las municipales en mayo y había que aparentar que se hacía algo
Para ello, montó otro teatrillo haciendo como que empezaban las obras demoliendo todo el interior del edificio, para luego él mismo (si, el mismo) parar las obras estando en funciones tras perder las elecciones, con la excusa de licitar el Control de Calidad.
Y se ha puesto de manifiesto que era una excusa y una mentira cuando el desorbitado importe por el que se licitó el Control en 2011 se ha rebajado en 2018 nada menos que un 46%. Contra la opinión de Bellido y los suyos, mantuvimos en su día que era una excusa porque era imposible que el Control de Calidad costara casi 88.000 euros más IVA y ahora se pone de manifiesto la mentira cuando lo licitan por algo menos de 51.000€, que aún nos sigue pareciendo excesivo. Pero esa “rebaja” de 37.000 euros deja la mentira al descubierto y con las vergüenzas al aire a quienes la montaron y quienes la defendieron.
Como Pablo Bellido, feliz por la enésima primera piedra y feliz por ver por fin obreros trabajando en el Centro de Salud, que, a la vista de lo sucedido con los obreros-figurantes en la visita de Page a las obras del hospital de Guadalajara, ahora se nos antoja que esta última “función” tuvo su ensayo previo en Azuqueca.
El jueves día 2 de agosto, un concejal de nuestro grupo quiso comprobar lo que nos habían comunicado varios vecinos: que normalmente apenas hay personal en la obra y que hay días que no ven a nadie. Efectivamente, a las 8.30 de la mañana presenció la llegada de los obreros (un total de 3) a las obras del Centro de Salud, que se encontraron el tajo cerrado. No había llegado aún el encargado de abrir la valla y allí se tuvieron que quedar esperándole.
En verano la recomendación del Gobierno, la Junta, los sindicatos, es que en la construcción la jornada sea de 7 de la mañana a 15 para evitar estrés y golpes de calor. De hecho, ese mismo 2 de agosto falleció un obrero por golpe de calor en Murcia. Pero en la obra del Centro de Salud, a las 8.30 todavía estaba el tajo cerrado y solo tres obreros esperando.
Seguiremos atentos a ver cómo evoluciona la “obra”, pero lo cierto es que en casi tres meses tras la “enésima piedra” apenas se ha visto más movimiento que trabajos de limpieza y retirada de los escombros restantes de la demolición interior.
Esa es la verdadera realidad de la gestión de Page y los suyos: frases grandilocuentes, actos de propaganda, y teatrillos de primeras, segundas y n primeras piedras, los que se quieran y al precio que sea, para crear una realidad paralela que les mantenga en el poder y en la colocación de sus amigos, pero en cuanto se va el actor principal, se corre el telón, se acaba la función, se van los secundarios y los figurantes y queda lo que queda: un retén de tres obreros para seguir aparentando que se hace algo.
Agustín Gil, concejal del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Azuqueca de Henares
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