La Junta de Castilla La Mancha ha desarrollado un sistema de control a través de un código QR para contar con un registro de clientes en bares y restaurantes de la región tras decretar su reapertura después de varias semanas cerrados por Decreto de Emiliano García Page.
Según ha explicado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, se ha implantado este sistema de control «para evitar en la medida de lo posible una transmisión comunitaria y la expansión del COVID-19».
Por ello, según Fernández Sanz, «es preciso adoptar medidas de control respecto de las actividades en el sector de las actividades de ocio, hostelería y restauración, así como en los que se celebren eventos y actividades multitudinarias».
El consejero cree que ahora “puede ser el momento en el que se inicien los instantes de mayor relajación de las medidas higiénicas frente al COVID-19 como el uso de mascarillas, la distancia de seguridad de un metro y medio o la higiene de manos”.
Para ello, se ha creado la aplicación Ocio Responsable en Castilla-La Mancha «para ayudar en la gestión de la crisis de Salud Pública creada por el COVID-19», según fuentes del Gobierno regional.
Dicha aplicación permitirá reforzar la trazabilidad de los contactos en los bares, restaurantes y resto de establecimientos de hostelería, facilitar y activar el inicio de las labores de rastreo por parte de la autoridad sanitaria en caso necesario. De momento es voluntaria, pero no se descarta su aplicación obligatoria
Según han señalado los responsables de varios establecimientos del sector de la hostelería de la región a EL HERALDO DEL HENARES, «esta medida no es otra cosa que seguir criminalizando al sector: ¿por qué no se implanta este código en el tren, en las tiendas de ropa, en las iglesias, en los centros de trabajo…?».
Según estas fuentes, «se apunta de nuevo como sospechosos a los bares y restaurantes, ya que serán la única actividad económica con este control».
Otra de las dudas y quejas que plantean es qué hacer con esos clientes, sobre todo los de mayor edad, que no cuentan con dispositivos móviles aptos para descargarse esta aplicación: «¿Les tendremos que tomar los datos y el DNI a mano y apuntarlos en una libreta, o tendrán que renunciar a salir a tomar una cerveza?».