El Heraldo del Henares
Después de seis generaciones, el nuevo Opel Astra entra en escena bajo el cobijo de Stellantis. Como es lógico, aprovecha las sinergias de sus “primos” de marca y, con ello, aspira a ser el líder de los compactos. Un mercado que en los últimos años ha visto mermado su protagonismo por la afición que hay ahora mismo a los SUV. Pese a ello, el nuevo Astra ofrece argumentos más que suficientes como para convertirse en nuestro compacto de referencia.
A modo de introducción sobre el nuevo modelo, recordar como hemos dicho antes que es la sexta generación y que llega a nuestro mercado con gran cantidad de motorizaciones. Por un lado las habituales gasolina y diésel y por otro todas las posibilidades de hibridación y eléctrico total. Todo el diseño y desarrollo, así como la producción se ha hecho en la planta de Rüsselsheim, en Alemania, aprovechando todas las sinergias, tecnologías y avances de Stellantis.
Si en este nuevo Astra queremos encontrar algún tipo de relación con la anterior generación, con unas líneas más redondas y suaves, no la vamos a encontrar, ya que tienen muy pocas cosas parecidas. En esta nueva generación, el Astra es mucho más afilado y con líneas más rectas y aristas bien definidas, especialmente en la parte delantera y trasera. De esta manera, con un diseño moderno y “agresivo”, el Opel Astra quiere hacerse con un “trozo” importante del mercado juvenil.
Centrándonos en la parte delantera, el denominado OPEL VIZOR es la nueva referencia de la marca. Esta nueva parrilla central llama poderosamente la atención, acabada en negro brillante y en la que se alojan sus afilados grupos ópticos, siempre con tecnología LED de serie y opcionales los Intelli-Lux Pixel LED. En zona más baja, podemos observar unas aberturas que dejan paso a la ventilación así como las molduras en los extremos que alojan los faros antiniebla. Sin duda, este OPEL VIZOR, es un rasgo diferenciador del modelo y le dota de un carisma especial.
La zaga, también cobra protagonismo especial, con un diseño fino y estilizado con cierta similitud al del Mokka. El logo de Opel y el nombre de Astra ocupan la parte central del portón y la tercera luz de freno, colocada en la zona central del spoiler superior, es en formato vertical, otro rasgo diferenciador y exclusivo del nuevo Astra.
Sin duda, de la vista lateral, siguen llamando la atención sus líneas rectas acompañadas de unas llamativas llantas de aleación. Los cristales traseros vienen tintados y en general la sensación que ofrece el conjunto con la línea de techo más baja es de una imagen mucho más deportiva que la de la anterior generación.
En cuanto a las medidas exteriores, este nuevo Astra crece ligeramente respecto al anterior, lo que es un claro indicativo de una notable mejoría en la habitabilidad interior, sobre todo en las plazas traseras. La longitud alcanza los 4,373 metros, el ancho es de 1,860 metros mientras la altura es de 1,470 metros y la distancia entre ejes de 2,675 metros.
En cuanto al maletero, llegamos hasta los 422 litros (en modelos térmicos, 70 menos para los híbridos), una cifra muy importante y de las mejores del mercado.
La segunda fila de asientos se puede abatir 60:40 hasta alcanzar un volumen máximo de 1285 litros (17 litros menos para las versiones enchufables).
Tecnológicamente muy avanzado
Solamente con hacer el gesto de abrir la puerta del nuevo Astra y observar el nuevo salpicadero, un soplo de “tecnología” nos pega de lleno y nos avisa de que estamos ante un coche de armas tomar. Está claro que los ingenieros de Opel han dedicado mucho tiempo al diseño de su carrocería, pero no queda ninguna duda, que también han echado el resto en el interior.
Llama la atención desde el primer momento la doble pantalla horizontal situadas en el salpicadero, formando el conjunto conocido como “Pure Panel” que ya estreno el Mokka y que tienen un tamaño de 10 pulgadas cada una. La primera de ellas, situada justo en frente del conductor, contiene la información esencial y necesaria para tener controlado el funcionamiento correcto del Astra, rpm, temperatura, odómetros, velocímetro y ofrece pequeñas posibilidades de personalización.
Siguiendo con la línea del salpicadero, en la parte central y girada hacia el conductor, tenemos la segunda pantalla, que hace las veces de info entretenimiento y es táctil. Desde ella podemos controlar todo el sistema de navegación y entretenimiento, por supuesto con conexiones inalámbricas de Apple CarePlay y Android auto. Tan solo mantiene en el exterior de esta pantalla y con botones físicos, el control del climatizador, luneta térmica, asientos y volante calefactables. En la parte más baja y justo delante de la palanca de cambio, un pequeño cajón portabojetos esconde el sistema de carga del móvil de forma inalámbrica. Y justo detrás de la misma palanca, un enorme “cofre” portaobjetos de gran capacidad que hace que muchas cosas no anden “sueltas” por el habitáculo.
El nuevo Astra tiene disponible multitud de “gadchet” y elementos de seguridad que le convierten en un coche muy cómodo y seguro a la vez: control de crucero adaptativo, cámara de marcha que gira dependiendo de la posición del volante, apertura, cierre y arranque con manos libres, climatizador automático con dos zonas independientes, luces automáticas, sensor de lluvia…
En cuanto al espacio para los ocupantes, debemos decir que supera con nota el examen. Las plazas delanteras son cómodas y amplias y el conductor tiene una visión perfecta de ambas pantallas y acceso muy fácil a toda la “botonería” para controlar todas las necesidades y comodidades de la conducción. En cuanto a las traseras, también destacan por su amplitud. Incluso pasajeros con más altura de la habitual, tendrán espacio libre más que suficiente antes de dar en el techo con la cabeza y las piernas, salvo que los asientos delanteros estén en su posición más retrasada, tienen su espacio vital asegurado.
Motor y comportamiento
Los retoques que los ingenieros de Stellantis han dado a su chasis, con una rigidez un 14% superior a la anterior generación, así como suspensiones específicas y tacto de dirección mucho más refinado y sensible, hacen del Astra un coche con un dinamismo muy alto, súper divertido de conducir en tramos revirados y con una respuesta excelente en todos los aspectos. Por supuesto, el equipo de frenado no podía ir a la zaga, y su funcionamiento en excelente, sin acusar calentamiento aún cuando le exigimos con “algo de curveo” y carga.
El motor de 1,2 litros y 131 caballos se muestra idóneo para este tipo de coche. Tiene una respuesta contundente si buscas algo de prestaciones, y muy tranquilo y fácil de conducir si te decantas por una conducción más tranquila. Los consumos, en ningún momento han pasado de los 6 litros cada 100 km, incluso en autovía, manteniendo los márgenes de velocidades legales, por debajo de los 5,5.
Merece una mención aparte la excelente insonorización del conjunto. El nuevo Astra podemos decir que destaca por una conducción casi silenciosa, con una ausencia de vibraciones y ruidos casi total y una rodadura muy silenciosa y cómoda.
Sin duda, ante la avalancha de nuevos SUV que están inundando el mercado, esta nueva versión del compacto de Opel, cargado de tecnología y con un diseño tanto interior como exterior a la última, se va a hacer con un trozo importante del mercado en nuestro país.
