“Los músicos del silencio”
El trabajo de Mummenschanz (“mascarada”) se inscribe dentro de una larga tradición de las artes escénicas centroeuropeas que podríamos denominar de manera genérica como teatro visual, corriente en la que situaríamos a título de ejemplo a Momix o al teatro Negro de Praga, agrupaciones legendarias y que a diferencia de del grupo de teatro suizo responsable del montaje que comentamos sí han visitado en varias ocasiones nuestros escenarios.
Teatro de objetos, teatro de máscaras, dentro de esa opción por expresarse en un lenguaje no verbal capaz de traspasar fronteras nacionales y culturales y llegar a todos los públicos Mummenschanz ha venido desarrollando una forma peculiar de expresión caracterizada por convertir materiales y objetos cotidianos en formas abstractas o en máscaras expresivas, siendo su mayor mérito el ingeniárselas para que los objetos más diversos y anodinos (telas, “tubos”, muelles, letras de gomaespuma,…) adquieran características de animales o una expresividad gestual específicamente humana.
Dado el estado actual del desarrollo de la tecnología aplicable a la escena, cabe decir -y ahí está, a mi juicio, uno de sus mayores logros- que el trabajo de Mummenschanz parece un tanto rudimentario, artesanal, en el mejor sentido del término. Todo lo fían a una iluminación sectorializada que incidiendo sobre materiales fosforescentes o de texturas especiales hace resaltar los objetos sobre un fondo negro. Merced a la pericia de los manipuladores se consiguen que figuras geométricas, cordeles, globos o telas vaporosas adquieran un supremo grado de expresividad y nos transporten a un universo onírico de imágenes fulgurantes, movimiento, luz y color donde la abstracción compite con caprichosas formas zoomórficas o antropomórficas.
El cuerpo de los actores, embutido en mallas negras ora se confunde con el fondo dando visibilidad exclusivamente a los objetos/animales que dialogan, juegan, se pelean, se cortejan o interpelan al espectador, ora se hace visible en simbiosis con máscaras inverosímiles de plastilina, o formando figuras de un bestiario de rara apariencia que son todo un reto para la imaginación. Y es que, ayuno del vuelo poético de algunas secuencias -como la grácil evolución de ciertas especies de la fauna marina- el espectáculo, de desarrollo errático, construido ensamblando escenas inconexas, propende demasiado a la abstracción y a convertirse, superada la sorpresa, en una mera actividad de desciframiento para los más pequeños.
Ingenioso, juguetón, rico en invención, de ocasional belleza fulgurante y de una factura técnica irreprochable el espectáculo no siempre destila ese precipitado emocional, esa alquimia y esa magia que son ingredientes inexcusables cuando uno se aventura por los parajes inexplorados la fantasía.
Gordon Craig, 15 X 2018
Ficha técnico artística:
Título: Mummenschanz.
Creación y dirección artística: Floriana Frassetto..
Con: Floriana Frassetto, Sara Hermann, Crista Barrett, Kevin Blaser y Oliver Pfulg.
Dirección Técnica: Eric William Sauge.
Madrid. Teatros del Canal. Sala Roja.
14 de octubre de 2018.