La secretaria general del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Carolina Agudo, ha pedido hoy explicaciones urgentes al presidente de las Cortes Regionales, Pablo Bellido, y le ha preguntado, al mismo tiempo, por qué fue ayer al centro de salud de Azuqueca de Henares (Guadalajara) «para amenazar e insultar a los profesionales sanitarios».
Así se ha pronunciado Agudo, tras el Comité de Dirección del PP-CLM, que ha estado presidido por el presidente Paco Núñez, donde ha cuestionado «qué autoridad sanitaria es Bellido para acudir al centro de salud de esta localidad para insultar a los sanitarios que se encontraban en ese momento saturados en plena sexta ola».
En este sentido, ha calificado de “denunciable” la actitud de Bellido, y ha recordado que se trata del “modus operandi” del Gobierno socialista de Page, que, “cuando les va mal” se dedican a insultar a todos los colectivos de esta tierra como ya hizo al principio de la pandemia, faltando el respeto a los profesionales sanitarios, docentes, alcaldes y a nuestros mayores.
“No ha habido colectivo castellanomanchego que no haya recibido un insulto por parte de Page”, ha lamentado Agudo en un comunicado.
La secretaria general del PP-CLM ha asegurado que la gestión sanitaria del Gobierno regional es una “auténtica vergüenza” con centros de salud saturados y colas interminables de pacientes esperando para una prueba debido a la falta de material y de personal.
“Y mientras tanto, Page y el consejero de Sanidad ni están ni se les espera”, ha indicado.
Asimismo, ha insistido en que el “lamentable episodio” protagonizado por Bellido debería “costarle el puesto” como presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha. Por eso, ha señalado que, “a una persona que representa la voluntad de los castellanomanchegos desde el más alto nivel institucional, no se le puede permitir que insulte y amenaza a nadie, y menos a los profesionales sanitarios que se están dejando la piel por salvar la vida de los demás”.
Largas colas y un protagonista inesperado en el centro de Salud de Azuqueca
Agudo se ha referido así a los incidentes que tuvieron lugar ayer a las puertas del servicio de Urgencias del centro de Salud de Azuqueca en la mañana de ayer lunes, 27 de diciembre, cuando el organigrama de profesionales había quedado reducido de tres médicos a uno solo.
Por ese motivo se informó a las personas que hacían cola a las 8 de la mañana que se realizaría un triaje a la entrada y aquellos pacientes cuya dolencia no se considerara una ‘urgencia médica’ tendrían que esperar a que fueran atendidas las urgencias.
Ante la repulsa y las protestas que esta información generó, desde el centro sanitario se tuvo que avisar a la Policía Local para que protegiera la entrada al servicio. Pero además de los agentes, también se presentó de forma sorpresiva en las puertas del centro el secretario provincial del PSOE de Guadalajara, exalcalde de Azuqueca y actual presidente de las Cortes de Castilla La Mancha, Pablo Bellido, que no ostenta ninguna competencia en materia de Sanidad.
Según informaron fuentes del propio centro de Salud azudense a EL HERALDO DEL HENARES, Bellido anunció que había hablado con dirección médica y que esta falta de médicos en urgencias era algo puntual. Además, según estas fuentes, acusó al personal de guardia de dar una información errónea a los pacientes que esperaban, al decirles que la responsabilidad de lo que estaba pasando era de la dirección y de Gerencia.
Fuentes del centro de salud confirmaron a este diario que, tras la marcha de Bellido, un componente del equipo sanitario sufrió una crisis de ansiedad, por lo que necesitó atención médica, si bien minutos más tarde se reintegró a su puesto de trabajo.
Por su parte, según un comunicado remitido por Bellido a este diario, el exalcalde azudense y actual presidente de las Cortes regionales ha señalado que «me parece intolerable que en su medio se deje entrever que he acusado al personal médico de nada, cuando lo único que he hecho es trasladar la información que se me ofrecía para que la pudieran ofrecer de manera íntegra y mucho más intolerable que se insinúe que mi responsabilidad en un ataque de ansiedad de una persona».