El Heraldo del Henares
Al menos 800 vecinos de Villanueva de la Torre están en pie de guerra contra su alcaldesa, Vanessa Sánchez, de Podemos, a la que acusan de haberles ocultado que el Gobierno regional de García Page ha autorizado la puesta en marcha de un centro de acogida de menores en el centro de Villanueva.
Se trata de un nuevo centro que gestionará la empresa Consulting Asistencial Sociosanitario tras hacerse en concurso público con la gestión de este servicio por delante de la empresa que actualmente gestiona el centro de menores ‘Lázaro’, en el barrio de Asfain, en Azuqueca, que cerraría tras la apertura del nuevo centro en Villanueva.
En concreto, se ubicará en la calle San Roque, 14, en lo que era el edificio de una antigua guardería, y tiene previsto abrir sus puertas el próximo día 1 de agosto para acoger un total de 15 internos, muchos de ellos menores inmigrantes no acompañados, conocidos como ‘menas’.
El ‘secretismo’ con el que Vanessa Sánchez y la Junta llevaron al principio la tramitación del proyecto provocó la reacción de los vecinos de Villanueva, que cada día dejan sus quejas en los grupos locales de las redes sociales y han recogido más de 800 firmas en contra del proyecto.
También mostraron su desacuerdo asistiendo de forma multitudinaria al pleno municipal del pasado mes de enero, ya que, según le hicieron saber a la alcaldesa, temen que este nuevo centro no generará otra cosa que inseguridad en las calles del municipio.
Se da la circunstancia de que la empresa que se hizo con el concurso de adjudicación, Consulting Asistencial Sociosanitario, ganó por ser la oferta económica más baja, al cobrar 105,38 euros al día por interno, frente a los 119,49 €/día de la Asociación de Asistencia Integral Lagunduz-Fundación Salud y Comunidad. Sin embargo, en los aspectos cualitativos, como el educativo, laboral, ocio, actividades, etc, Asistencia Integral superó claramente en la puntuación a Consulting.
Es decir, según ha señalado a EL HERALDO DEL HENARES la exalcaldesa del municipio y portavoz municipal del PP, Marta Valdenebro, “para un tema tan sensible y que causa tanta alarma social, la Junta del socialista García Page ha primado la rebaja económica sobre la calidad del servicio”
Valdenebro ha añadido que “mi postura es oponerme a su apertura, tal y como siempre he manifestado. No tenemos los recursos básicos para nuestro día a día; menos aún para atender un centro de estas características cuya apertura ha sido ampliamente rechazada por mis vecinos”.
Valdenebro, que es la responsable política que más activamente se ha movilizado en contra de la instalación de este centro, ha señalado que “Villanueva no cuenta con infraestructuras suficientes para atender a 16 menores no acompañados: no tenemos ni centro de salud, no se garantizará el anonimato de los menores al ser una población muy pequeña, no está garantizada ni su seguridad ni la de los vecinos, pues solo existe un policía local para 7.000 vecinos, el Ayuntamiento no tiene recursos para atender a los menores…”.
De hecho, su partido ha creado el hastag #NoalCentrodeMenoresenVillanueva con el que pretende movilizar a sus vecinos para impedir la apertura del centro tal y como ahora está diseñada.
De momento su apertura se está retrasando, ya que, aunque estaba previsto que abriera sus puertas el pasado 1 de febrero, la empresa adjudicataria no cuenta con la licencia necesaria para proceder a la apertura. La tramitación de dicha licencia se está llevando a cabo en la Diputación de Guadalajara, al no disponer Villanueva de la Torre de arquitecto municipal de carácter funcionario, único profesional habilitado para este tipo de expedientes.
Además, como la adjudicataria no contaba con la oportuna licencia, la Junta de Castilla La Mancha le concedió un plazo extraordinario de seis meses para subsanar dicho defecto. Por tanto, si el Servicio de Arquitectura de la Diputación, con una gran sobrecarga de trabajo al tener que realizar los informes de la gran mayoría de pequeños municipios de la provincia y que ha de seguir un riguroso orden de entrada, no informa respecto de la licencia antes del 1 de agosto, la actual adjudicataria perdería sus derechos. Estos entonces pasarían a la segunda empresa que pujó por el servicio, la misma que gestiona el actual centro en Azuqueca, por lo que este seguiría abierto y no se produciría el traslado de los menores a Villanueva de la Torre.
De seguirse adelante la concesión al actual adjudicatario, el coste total del servicio sería de 1.732.447,20€ para cuatro años, desglosado de la siguiente manera: 527.953,80€ en 2019; 578.536,20€ en 2020; 576.955,50€ en 2021; y 49.001,70€ en 2022. Todo ello a razón de 105,38€/día/interno con el IVA exento.
‘Sobreocupación’ de los centros de menores por la crisis migratoria
Según ha podido saber EL HERALDO DEL HENARES, en septiembre de 2018, la fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Guadalajara, Rocío Rojo, y la fiscal de Menores, Elvira Andrés, solicitaron la puesta en marcha de más centros de menores en nuestra provincia.
Según explicaron, habían recibido un escrito firmado por todas las fundaciones que trabajan con menores en el que se les pedía ayuda ante la situación «inviable que están sufriendo debido a la increíble sobreocupación de los centros actuales». Por ello, pedían más medios para atender incremento motivado por la crisis migratoria.
Técnicamente, se denominan Centros de Primera Acogida y Valoración (CPAV) de Protección de Menores. Estos, colaboran con la Administración regional en la aplicación de medidas inherentes a la guarda de los niños que están bajo su tutela.
En principio, los menores acogidos, ya sean españoles o inmigrantes, no son delincuentes, sino que son derivados a estos centros por sufrir una o varias causas de vulnerabilidad, como por ejemplo, ser víctimas de maltrato, de abusos sexuales, hijos de drogodependientes, huérfanos, o niños que se han escapado de casa, o que han sido abandonados por sus padres, etc, por lo que suelen ser chicos en situación de desamparo y muy vulnerables, por lo que suelen tener unas necesidades muy concretas y especiales para su valoración.
Por este motivo, necesitan de una respuesta y protección especial para intentar recuperarlos y que se puedan adaptar con normalidad a vivir en sociedad. Aunque son mayoría los que lo consiguen, algunos de ellos acaban cometiendo pequeños delitos y, en casos excepcionales, de extrema gravedad.
