La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, se ha concentrado esta mañana en todas las subdelegaciones del Gobierno del país, entre ellas las de las capitales de Castilla-La Mancha, como Guadalajara, en defensa del convenio sanitario con Muface y para denunciar las situaciones de desatención sanitaria que están sufriendo los mutualistas.
Tras las movilizaciones llevadas a cabo desde el pasado mes de noviembre y los llamamientos en el Consejo General de Muface, el Congreso de los Diputados, la Comisión Europea y el Defensor del Pueblo, así como la presión por la huelga prevista para hoy mismo, el Gobierno publicó una tercera licitación con una financiación que supone un incremento de más de un 40% respecto al actual convenio.
Ante este hecho objetivo, CSIF ha aplazado la convocatoria de huelga hasta que se resuelva la tercera licitación el próximo 4 de marzo, han informado fuentes de este sindicato en un comunicado.
«Pero no es un cheque en blanco y la Central Sindical continuará exigiendo y reivindicando una solución definitiva a esta crisis, así como la continuidad de un modelo que actualmente cuenta con 74.083 mutualistas en Castilla-La Mancha, 50.405 de ellos atendidos por aseguradoras», han añadido, de los cuales, 9.000 corresponden a la provincia de Guadalajara.
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«En este sentido, las concentraciones llevadas a cabo este jueves son un llamamiento al Gobierno y a las aseguradoras para apelar a la responsabilidad que tienen ambas en una crisis que ha llevado al límite el modelo del mutualismo administrativo y ha perjudicado a miles de ciudadanos con temor, miedo, incertidumbre y lo que es incluso más grave, denegación de pruebas, tratamientos o intervenciones quirúrgicas», han señalado.
Por este motivo, CSIF ha denunciado ante la Fiscalía General del Estado todos estos casos.
Además, la Central Sindical ha censurado el «doble juego que se ha llevado a cabo desde el propio ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública al poner en duda el mutualismo administrativo, con demagogias sobre privilegios o sobre su eficacia, ya que, de hecho, son los propios mutualistas los que financian el concierto sanitario al sustraerse mensualmente de sus nóminas una cantidad que varía dependiendo de su categoría».
Este modelo de sanidad pública concertada ha demostrado su eficacia, tanto en ahorro a las arcas públicas como en descongestión de unos servicios de salud, han añadido, por lo que han insistido en que es inasumible absorber a más de 50.400 mutualistas y que el trasvase de todos ellos impactaría de manera muy negativa en el Sescam, ya muy tensionado por los recortes que mantiene el Gobierno regional de Emiliarno García Page.