«Preocupación y un profundo sentimiento de inseguridad». Esa es la sensación que tiene buena parte de los propietarios de establecimientos comerciales de Azuqueca de Henares tras los continuos y reiterados robos con fuerza, incluso con violencia e intimidación, que están sufriendo en las últimas semanas.
Así, según han confirmado a EL HERALDO DEL HENARES fuentes de la investigación, «estamos recibiendo avisos, una semana con otra, de entre tres y cinco robos semanales en locales comerciales de la localidad».
Estas fuentes han señalado que en buena parte de los casos el modus operandi es el mismo: lanzar la tapa de una alcantarilla contra el escaparate, entrar y coger efectos de venta rápida en el mercado negro. En otras ocasiones, el método utilizado es el apalancamiento de las puertas con una palanca de pie de cabra.
Peluquerías, locales de estética, peluquerías caninas, farmacias, gestorías, gimnasios… cualquier tipo de establecimiento es bueno para los delincuentes, según estas fuentes, que han añadido que la falta de más efectivos en la calle, tanto de la Policía Local como de la Guardia Civil, está dificultando la localización y detención de los responsables de estos robos.
Lo cierto es que Azuqueca de Henares salta a los medios provinciales, incluso a veces nacionales, de comunicación en los últimos meses por asuntos relacionados con la inseguridad ciudadana y la delincuencia.
Hace solo un mes, la asociación de comerciantes de Azuqueca, ACEPA, llegó a pedir a Blanco que reforzara las medidas de seguridad e incrementara la plantilla de policías locales, algo que todavía no ha tenido lugar.
Esta situación, que no es nueva, provocó una alarma tan generalizada entre la población azudense, sobre todo tras conocerse los datos del altísimo incremento de delitos en la ciudad a lo largo de 2018, que el propio alcalde azudense, José Luis Blanco, no tuvo más remedio que reconocerlo.