El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha manifestado en la mañana de hoy jueves 7 de enero que «esta´garantizado el cumplimiento del plan de vacunación contra el coronavirus en la Comunidad Autónoma».
Según han informado fuentes de la Junta en un comunicado, ‘Page ha aseverado que “todo está previsto, programado, perfectamente delimitado”, al tiempo que ha pronosticado que “el día 20 pueden estar vacunadas todas las residencias” de la Comunidad Autónoma’.
El presidente del Gobierno regional ha salido así al paso de las durísimas críticas realizadas por personal sanitario de las residencias de Guadalajara, quienes en declaraciones exclusivas a EL HERALDO DEL HENARES manifestaron que se les había marginado del proceso de vacunación y que con este retraso habría más muertes.
Según estos profesionales, la administración de la vacuna contra la COVID solo tiene alguna pequeña diferencia con la de la gripe, «nada que en menos de un cursillito de apenas 5 minutos profesionales de la sanidad como médicos y enfermeras no sepan entender». Y mucho menos, añadieron, porque la mayoría de ellos proceden de la sanidad pública o compatibilizan su labor en esta Administración.
«Estamos perfectamente capacitados para hacer extracciones de sangre, para llevarlas a los centros de salud, se cogen vías para sueros, se ponen sondas etc, pero ¿no estamos capacitados para poner una simple vacuna? Esto tiene un nombre: desconfianza ante los sanitarios de la región», manifestaron a este diario.
También se refierieron a las supuestas diferencias entre otras vacunas y la de la COVID en relación a la cantidad a administrar a cada paciente, como excusa de la Administración para no permitirles formar parte del procedimiento: «Entre las diferencias está que cada vial contiene varias dosis, no una, pero no es nada complicado administrar varias vacunas a otros tantos internos una vez que se divide cada vial».
«Están dejando enfermar y morir a muchos internos en nuestras residencias por negligencia», finalizaron.
Ahora, Page ha anunciado el aumento de profesionales dedicados a este fin, que ha pasado de 350 a 476 efectivos y que ha permitido “programar hasta 238 equipos, más del doble que en la campaña de la gripe”.
“Quiero asegurar plenamente el cumplimiento de todas las previsiones de la primera fase de vacunación”, ha subrayado el jefe del Ejecutivo autonómico, que ha incidido además en la conveniencia de llevar a cabo este plan atendiendo a la metodología que requiere la propia vacuna, “sin prisa, pero con el orden que está establecido a nivel nacional”, ha apuntado.