Un estudio realizado por la Fundación Artemisan ha revelado que la situación de la población de liebres en esta comunidad autónoma es mejor de lo esperada tras la aparición de la mixomatosis hace un año.
En este sentido, el trabajo que se ha llevado a cabo indica que el impacto de la Mixomatosis podría no haber sido tan grande en Castilla-La Mancha, o que en el momento de los muestreos las poblaciones ya empezaban a tener síntomas de recuperación.
Según han informado fuentes de Artemisan en un comunicado, este estudio se ha llevado a cabo con el apoyo de la Junta de Comunidades y la colaboración de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha.
En el verano de 2018 se detectó por primera vez en España un brote de mixomatosis en liebre ibérica, enfermedad que el conejo de monte viene padeciendo desde los años 1950.
En Castilla-La Mancha, los primeros focos se detectaron en la provincia de Cuenca y, según los datos oficiales, la enfermedad se ha ido extendiendo por el resto de provincias, aunque en distinta intensidad.
Con el objetivo de conocer el impacto de la mixomatosis en las poblaciones de liebre de Castilla-La Mancha, Fundación Artemisan ha liderado un estudio que forma parte de MIXOlepus, un proyecto global que tiene por objeto encontrar soluciones prácticas ante el brote de la enfermedad en liebres y del que forman parte varias entidades del ámbito público y privado.
Otra de las conclusiones de este informe es la necesidad de realizar más estudios e implicar al colectivo de cazadores en censos. Además, los resultados de las encuestas a los cotos muestran que «el sector cinegético está comprometido con la conservación de la liebre ibérica en Castilla-La Mancha, dado que la mayoría de los cotos participantes realiza gestión activa dirigida a la liebre y una proporción importante de los cotos no cazó la liebre o lo hizo con restricciones tras la aparición del brote».
Metodología
En primer lugar, se llevó a cabo una encuesta dirigida a los titulares de los cotos de caza para conocer el impacto y alcance de la enfermedad y conocer de primera mano la gestión que se realiza para la liebre ibérica, especie protagonista de la caza con galgo, que cuenta con un gran arraigo en la región.
Por otro lado, se realizó un trabajo de campo consistente en transectos lineales de ancho variable nocturnos en 44 cotos de la región para obtener estimas de densidad, en concreto el número de liebres por cada 100 hectáreas (ha). Se escogieron cotos con distintos tipos de hábitat, con y sin Mixomatosis para asegurar que el estudio fuera representativo.
Estas estimas de densidad fueron realizadas con dos metodologías diferentes. Por un lado, por medio del programa DISTANCE 7.2 y por otro lado aplicando el método de Emlen. Por último, se estudió la relación entre estas variables (densidad e impacto de la Mixomatosis) y variables de altitud, gestión cinegética y tipo de hábitat observado en cada coto.
Resultados
Se recibieron un total de 67 encuestas, de las cuales un 70% declaraba haber observado liebres enfermas/muertas desde primavera-verano de 2018. Las provincias más afectadas fueron Albacete, Ciudad Real y Toledo mientras que las que menos fueron Guadalajara y Cuenca.
En cuanto a la caza y gestión cinegética, la gran mayoría de los cotos cazan la liebre (más del 80%), en un 34% de los cotos las liebres se cazan únicamente con galgos, en un 30% sólo con escopeta y en otro 30% con ambas modalidades. Casi el 50% de los cotos tienen zonas de reserva donde no se cazan las liebres y cerca de un 30% de los cotos establece cupos máximos de capturas. Finalmente, más de la mitad de los encuestados no cazó la temporada pasada o lo hizo con restricciones.
En cuanto al trabajo de campo, se llevaron a cabo los transectos en 44 cotos diferentes durante febrero y marzo de 2019, cubriéndose una longitud total de 550 km y un total de 549 liebres observadas. La densidad promedio para toda la región fue de 7,66 liebres/100 ha.
Las provincias con una mayor densidad fueron Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo (en torno a 8 liebres/100 ha) mientras que para Cuenca la densidad fue de 3-4 liebres/100 ha.
Se observó una mayor densidad de liebres a mayor altitud del coto y en cotos en los que se realiza gestión por la especie (perdederos, comederos y bebederos y control de la predación, entre otros), y no se encontró una relación clara con el tipo de hábitat predominante en el coto o la presencia/ausencia de mixomatosis.
Por otro lado, fue interesante ver que a mayor altitud había una menor probabilidad de que las liebres tuvieran mixomatosis, lo cual podría deberse a la ausencia o baja abundancia de vectores a partir de cierta altitud.
«Desde Fundación Artemisan, hacemos un llamamiento para que el sector siga comprometido por la especie y siga participando en las encuestas epidemiológicas promovidas por la Administración, así como estudios de campo como este», han señalado estas fuentes.
Fundación Artemisan quiere mostrar su agradecimiento a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la Federación de Caza de Castilla-La Mancha y a todos los cotos y personas que de forma desinteresada han hecho posible este estudio.