Efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos y de las brigadas de la Diputación se han desplegado por los municipios más afectados por las fortísimas tormentas que en la noche de ayer lunes descargaron con intensidad fuertes trombas de agua, incluso granizo, en buena parte de la provincia alcarreña.
Según estas fuentes, se trataba de “limpiar infraestructuras tales como puentes que han quedado atascados, alcantarillas y acequias», todo ello con el fin de que ante la alerta de nuevas tormentas, «el agua pueda fluir y no provoque incidencias tan graves como las que se produjeron ayer”.
En este sentido, los bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios, CEIS, de la Diputación alcarreña, intervino, de forma coordinada con la empresa pública GEACAM y con Protección Civil para poder atender a todos los avisos recibidos.
Las incidencias más graves tuvieron lugar en hasta nueve municipios de distintas zonas de Guadalajara: Molina de Aragón, Cincovillas, La Cabrera, Torija, Hita, Caspueñas, Alovera y Azuqueca de Henares. Pero también, en Alovera, Trijueque, Sigüenza, Fuentes de la Alcarria, Orea…
Por un lado, la urbanización Arcipreste de Hita fue la que sufrió mayores daños y concentró el mayor despliegue de los bomberos del Consorcio Provincial, que tuvieron que evacuar hasta 50 personas atrapadas por la crecida del río Badiel y achicar las inundaciones en viviendas y garajes, según fuentes de la Guardia Civil de Guadalajara.
En el resto de municipios, principalmente se trató de achiques en garajes y viviendas y retirada de elementos caídos y fueron movilizados efectivos de los tres parques de bomberos que tiene en CEIS para cubrir los avisos en todas las zonas afectadas.
Uno de los municipios más afectados fue Azuqueca de Henares, donde dos de sus barrios, Vallehermoso y la Estación, sufrieron cuantiosos daños por inundaciones en garajes. En Azuqueca, la tromba de agua y granizo que cayó sobre todo desde las 21,35 a las 22,00 horas, dejó ramas de árboles caídas, garajes inundados, cortes de luz…
Según el alcalde azudense, José Luis Blanco, “no existía ningún aviso que hiciera prever la virulencia con la que descargó la tormenta en Azuqueca”.
Blanco ha señalado que en algunos barrios como Vallehermoso “se arrastra un problema en la red de saneamiento desde hace décadas y que a pesar de diferentes intervenciones realizadas no hemos logrado resolver”.
“Como equipo de Gobierno somos los encargados de que la ciudad funcione y a pesar de que la tormenta sea una circunstancia imprevista, asumimos nuestra responsabilidad en el suceso de ayer, entiendo las quejas que hemos recibido de todos los vecinos afectados y vamos a explorar nuevas vías para acometer mejoras en la red de algunas de las zonas afectadas”, ha indicado el alcalde.
Blanco también ha asegurado que pedirán responsabilidades a la compañía eléctrica por el corte del suministro en varias calles del municipio durante cuatro horas a raíz de la tormenta.
En este sentido, desde el Grupo Municipal del PP de Azuqueca se ha recordado en un comunicado que «cada vez que llueve, los vecinos del barrio azudense de Vallehermoso se ponen a temblar, porque en cuanto la lluvia es un poco fuerte, la inundación está asegurada. Llevan años denunciando la situación, y pidiendo soluciones al Ayuntamiento de Azuqueca, al que ya en 2018 presentaron un escrito con más de 400 firmas exigiendo la adopción de medidas». A ello se sumará este grupo político con una moción en el próximo pleno.
En Alovera, las calles de algunos barrios como Parque Vallejo se convirtieron en ríos de agua ante la imposibilidad del alcantarillado de evacuarla a la misma cantidad que descargaba la tormenta.
En Valdesaz, según ha informado la APAG, una manta de granizo cubrió las plantaciones de aromáticas, por lo que ahora habrá que evaluar los daños producidos a estos campos. También granizó en Orea, Palazuelos, Atienza, Carabias, Valdeavellano, Caspueñas…
Según la APAG, la tormenta superó con creces las expectativas y alertas previstas: las zonas por donde paso algún ramal de la tormenta registraron entre 40 y 120 litros por metro cuadrado y arrasaron parcelas enteras de cultivos.
En Molina de Aragón, según ha informado su Ayuntamiento, las calles Rondalla de Santa Cecilia, Cronista Claro Abánades y la avenida Manrique de Lara sufrieron inundaciones en diversos bajos comerciales, locales de hostelería y alimentación y garajes, por lo que tuvieron que intervenir los bomberos del parque local para achicar el agua con motobombas. En este municipio llegaron a caer en pocos minutos 40 litros por m2.