Nadie sabe si ronca hasta que dormirnos con alguien y a la mañana siguiente vemos que no ha pegado ojo. Según un estudio realizado por el doctor en medicina pulmonar Richard J. Schwab, cerca del 57% de los hombres y el 40% de las mujeres roncan.
Muchas veces es inevitable, pero hoy queremos que conozcas algunos consejos para saber cómo dejar de roncar.
Dormir de lado y cabeza alta
Muchas personas suelen dormir boca arriba. Y, aunque es una posición cómoda, es en la que tenemos mayor facilidad para obstruir nuestros conductos respiratorios.
Esto se debe a que las mucosas caen directamente hacia nuestra garganta, lo que dificulta la respiración.
Una buena manera de evitarlo es durmiendo de costado. Gracias a ello facilitaremos el paso del aire por nuestra nariz y boca.
Si la postura lateral no te parece cómoda, otro buen recurso es mantener la cabeza elevada con una almohada gruesa. Esto hace que nuestra nariz y boca apunten ligeramente hacia abajo, evitando que se obstruyan.
Otro elemento que puede ayudar a evitar los ronquidos es un colchón viscoelástico, ya que este se adapta mucho mejor a tu postura al dormir y evita que obstruyas tus vías respiratorias.
No al tabaco y al alcohol
Dejar el tabaco y el alcohol puede ser un hecho que cambie radicalmente tu vida. Uno de estos cambios es dejar de roncar, ya que el consumo de estas drogas tiene un impacto negativo en el sistema nervioso central.
Al relajarse la musculatura, provoca que los tejidos que conforman la garganta obstruyan el paso del aire más fácilmente. Además, el tabaco produce una inflamación en la garganta con la que somos más propensos a roncar.
Menos peso, mejor respiración
Cómo dejar de roncar también depende de nuestro peso. Y es que las personas con sobrepeso y obesidad son mucho más propensas al ronquido por una razón muy simple: la grasa acumulada en las amígdalas y el cuello.
Por ello, llevar una vida saludable no solo se verá recompensado en tu estado de salud, sino que también evitará que molestes a tu compañero o compañera de sueño.
Mantener abiertas las vías respiratorias
Las segregaciones del cuerpo son inevitables, pero sí es verdad que mantener las vías respiratorias libres de mucosidad es la mejor manera de no roncar.
Para ello, intenta tener un ambiente limpio, en el que microorganismos como los ácaros no afecten a tu estado de salud.
En caso de tener mucha mucosidad, sea la razón que sea, intenta usar soluciones salinas o medicamentos que despejen tu nariz y garganta.
Los dilatadores nasales
El ronquido muchas veces empieza en el mismo punto en el que comienza la respiración, la nariz. Unas fosas nasales obstruidas pueden dificultar la respiración hasta el punto de roncar.
Una solución muy fácil y barata es usar dilatadores nasales, unas tiras de plástico que se adhieren a las aletas de la nariz abriéndolas completamente. Estas tiras no son solo un remedio antirronquidos, sino que además las usan los deportistas para respirar mejor durante una prueba atlética.
El protector bucal
La boca es otra de las entradas de aire. Mantenerla completamente libre es una buena manera de evitar los ronquidos.
Uno de los recursos más comunes para mantener libre nuestra boca son los protectores bucales. Al estilo de un boxeador norteamericano, el protector bucal no solo protegerá nuestros dientes, sino que además mantendrá la separación de nuestros labios y lengua para poder respirar mucho mejor durante la noche.
Cena ligera, ronquido ligero
Comer mucho antes de irse a la cama no solo provoca malestar en el estómago, sino que también puede favorecer el ronquido. Esto se debe a que una barriga llena hace que el diafragma, uno de los elementos más importantes en la respiración, se pueda ver presionado.
Por eso, una cena ligera es una buena manera de contrarrestar los ruidos nocturnos.
Canta y no ronques
Aunque pueda parecer una locura, cantar es un ejercicio muy bueno para evitar los ronquidos.
Esto se debe a que la musculatura de la garganta se ve reforzada al hacer esfuerzos con ella, por lo que durante la noche será mucho más difícil que se obstruya.
Por eso, aunque no afines como los ángeles, cantar es una manera muy fácil y divertida de mejorar tu respiración nocturna.
Las infusiones, remedio contra el ronquido
Las infusiones pueden ser un genial aliado contra los ronquidos. Específicamente, las infusiones de menta y eucalipto tienen la función de despejar nuestros conductos respiratorios.
Si puedes acompañar estas infusiones con un poco de miel, mucho mejor, ya que esta ayuda a eliminar las secreciones de los bronquios.
Consulta a un profesional
El ronquido puede que no esté relacionado con tus hábitos, y por muchos consejos de esta lista que sigas no puedas evitarlo.
Te recomendamos que si es habitual que ronques acudas a tu médico de cabecera, ya que puede que este hecho esté relacionado con alguna patología o problema médico. Sin duda, ellos son las voces cualificadas que te harán mejorar tu descanso y el de las personas que duerman contigo.